miércoles, 27 de mayo de 2009
un mes después
domingo, 28 de diciembre de 2008
Quería ser una cosa... y fue otra
martes, 15 de julio de 2008
qué se yo...
Cuando uno tiene menos de 15 sueña con tener más de 18 y cuando tiene más de 18 y se siente igual que cuando tenía 15 cree que la panacea es llegar a los 20. Pero de golpe se encuentra a los 20 sintiéndose igual de incomprendido, o peor… Con algunas experiencias más, a lo mejor algunos quilos más o con suerte, con algunos de menos. Con menos destreza para el deporte y con la necesidad de dormir más cantidad de horas. Uno va sintiendo que quedó allá a lo lejos y hace tiempo el adolescente que a todo se oponía, al que le parecía divertido pasarse la noche sentado en un umbral tomando petacas de Dios sabrá qué líquidos extraños. Ya no se opone por el simple placer de oponerse a todo lo que las autoridades dictan. Ya no suena tan buena la música de ESA banda que creíamos que siempre nos iba a gustar. En fin, las cosas van cambiando mientras nosotros, inocentemente, pensamos que crecer es acumular años. La vida se nos pasa mientras nosotros creemos que uno se hace adulto en la misma proporción en la que el N° “millón” del DNI se hace más lejano.
Hasta que un día nos pasa algo que tira por la borda todo aquello que creemos haber construido con nuestro “crecimiento”.
“Esto” puede ser aquello que cambie el curso de nuestra vida para siempre.
Y recién ahí, mis amigos, cuando nos toca tomar las decisiones difíciles es que empezamos a crecer. Recién ahí nos acercamos a lo que significa ser grandes.
Pero cuando la vida te golpea y te estuviste convenciendo de que sos grande, estas solo. Y no sólo por falta de compañía. Estas sólo porque sos vos el que tiene que decidir.
martes, 22 de abril de 2008
Pájaro Negro
Mi amigo Pabloluis (sí, sí... todo junto) quería que escribiera algo nuevo.
Nuevo, nuevo no me sale mucho. Para ser sincera... nuevo no me sale NADA.
Asique voy a dejarles la letra de una canción de la Bersuit que escuché cuando venía con el auto de la facultad.
Probablemente describa bastante bien el período por el que estoy pasando.
Se te partió el corazón
en veinte pedazos
y la pasión alumbro
un sol azul...
Y se agrietó la razón
como un viejo cascajo
descontrolado navío
perdió el timón...
Atormentado en el mar
más loco y enfermo
que revolvió hasta el asco
el odio y los nervios...
Mientras cruzaba la escena
un pájaro negro;
empapada de enigmas,
la fiebre subió.
Un viento en abanico
te golpea en el hocico.
Fantasmas, muñequitos
y gemidos despacito...
dan ganas de arruinarse,
si es que a alguien le importase
por que llena tus venas
esa sangre que engangrena...
Se evaporó la memoria
en un baño seco
con la inconciencia encendida
ya nada se vio...
Y se borraron las huellas
detrás de una puerta,
porque el amor no recuerda
lo que no sintió...
Pero quien calma ahora
al corazón furibundo
cuando el poder más inmundo lo quiere curtir...
De las tinieblas se viene
ese pájaro negro,
sobrevolando tu infierno
te invita a sufrir...
Un viento en abanico
te golpea en el hocico.
Fantasmas, muñequitos
y gemidos despacito...
Dan ganas de arruinarse,
si es que a alguien le importase
por que llena tus venas
esa sangre que engangrena...
¡Pájaro negro!...
ese pajaro negro...
Me parece una buena descripción de la soledad.
miércoles, 26 de marzo de 2008
Desaparecidos
Desaparecidos... Esa palabra dio la vuelta al mundo sin traducción.
Acosado por las denuncias internacionales, el Dictador Videla habló de los desaparecidos y lo hizo con un cinismo verdaderamente increíble.
"El desaparecido en tanto esté como tal es una incógnita, el desaparecido.
Si el hombre apareciera, bueno tendrá un tratamiento "X" y si la desaparicion se convirtiera en certeza de su fallecimiento tiene un tratamiento "Z". Pero mientras sea desaparecido no puede tener ningún tratamiento especial. Es una incógnita. Es un desaparecido.
No tiene entidad, no está. Ni muerto ni vivo.
Es un desaparecido."
El sólo hecho de pensar que este tipo se presentó ante las cámaras de televisión y se refirió con tanta impunidad, con tan poco respeto, con tanta frialdad al algo tan delicado y profundo como la desaparición de personas, me llena de nada. Me llena de pánico y vergüenza.
Un buen link para visitar es:
http://blog.rock.com.ar/notas29112004/documental-sobre-la-dictadura.html
Sin más que decir...
miércoles, 19 de marzo de 2008
Mis tres patitos pasados por agua
martes, 18 de marzo de 2008
Feliz aniversario
Hace como un año que no me despierto al lado de alguien a quien amo.
Hace como un año que la vida se convirtió para mí en muchos momentos, como la subida más empinada del mundo...
Hace como un año que no siento que valen la pena las canciones de amor y las noches de desvelo.
Hace como un año que "me envenenan los besos que voy dando" y que el acostarme con alguien se limita pura y exclusivamente a todo lo que sucede antes de dormir.
Hace ya demasiado tiempo que olvidé los motivos por los que me enamoré de vos y que sólo recuerdo los motivos por los cuales empecé a detestarte, a sentirme desilusionada en todos y cada uno de los aspectos posibles.
Hace como mucho tiempo que te convertiste en "mi ex" aunque hayas tenido el coraje de decirle a tu nueva novia que "nunca fuimos novios" (como si las palabras realmente significaran algo o pudieran medir lo que uno siente).
Hace como un año que dejaste de ser el tipo con el que quería compartir el resto de mi vida y te convertiste en un mal recuerdo. En una cicatriz en el pecho. En una mala imagen, en una visión horrible y devastadora.
Hace como muchos meses que no sentía ganas de decirte nada y ahora me encuentro acá sentada, frente a la pc tecleando como si las palabras brotaran de los confines más oscuros de mi ser.
Pero es que hace como un año que no te veo sonreir desde adentro, hace como un año que no veo brillo en tus ojos. Hace como un año que escucho gente que me pregunta "qué le pasó a este pibe?"
Es que hace como un año que empecé a hacer el duelo que estaba asociado al haberte perdido (no como si fueras un trofeo que otra ganó sino como si fueras alguien que se perdió dentro de sí mismo).
De pronto un día dejé de conocerte.
De pronto un día dejé de idealizarte.
Dejé de pensar en vos como el tipo hermoso que eras para mí y te convertiste en algo que llegó hasta a desagradarme profundamente.
De pronto un día tu imagen perdió en mí todo lo bueno que tenía y empecé a preguntarme si alguna vez fuiste ese al que amé. Ese que me miraba y podía atravesarme. Ese que me abrazaba y me hacía sentir segura, ínfima e insignificante pero enorme y hermosa a la vez.
Hace como un año que empecé a entender que los sentimientos carecen de sentido si no tienen un “alguien” que los despierte.
Hace como un año sentí que mi mundo dejaba de girar. Que la vida me dejaba desnuda y frente a una multitud que no hacía más que burlarse de mi. Que todos y cada uno de los sentimientos me eran arrancados de cuajo desde el pecho o desde donde fuera que se alojaban dentro mío y que eran enterrados en una fosa común con un balazo en la nuca.
Realmente sentí que me moría. Por primera vez en mi vida el dolor se hizo carne y me consumió. Me impidió comer y dormir por mucho tiempo. Me vació la mirada y las manos y me dejó sin esas sonrisas que surgen desde el alma.
Y hoy, habiéndote amado y odiado. Habiendo sentido lástima por vos y por mí. Habiendo deseado desaparecer del universo o que vos desaparecieras. Habiendo contenido la violencia que me surgió con la misma pasión con la que te amé. Habiendo llorado y habiéndome burlado de vos y de tu nuevo intento de vida perfecta. Habiendome sentido vacía de sentimientos nobles y llena de mierda. Hoy, que entiendo que de haber estado con vos me hubiera perdido de momentos realmente increíbles que atravesé durante todo este año. Hoy que sé que puedo disponer de cuanto tipo me interese. Hoy que sé que puedo conseguir lo que quiera porque no hay nada en el mundo que me detenga. Hoy, después de un año me encuentro con ganas de hablarte.
De volver a dormir con vos.
De volver a sentirme segura como cuando eras vos el que me abrazaba.
De volver a sentirme atravesada.